La diferencia entre Carpintero y Ebanista
Tanto los ebanistas como los carpinteros son maestros en el trabajo con la madera, y aunque a veces, la ebanistería y la carpintería se utilizan indistintamente, puesto que su trabajo nos puede parecer bastante similar, hay algunos detalles clave que diferencian a los profesionales de las dos categorías. pues se trata de dos oficios bien diferentes.
Ambos oficios trabajan principalmente con la madera como materia prima, pero el trabajo de un ebanista puede ser más complejo y detallado. Un ebanista puede trabajar en la construcción de cocinas, lavabos, armarios, encimeras de cocina, librerías y otros muebles, centrándose más en el equipamiento interior. Se puede decir que llevan el arte más allá de la carpintería, centrándose en los detalles más finos que se pueden construir con madera.
Es decir, el trabajo de un ebanista suele ser más preciso y complejo que el de un carpintero.
Un carpintero, por su parte, trabaja igualmente con la madera y puede construir cosas como escaleras, ventanas, marcos de puertas, librerías y armarios. Concentran sus habilidades en el uso de la madera para grandes proyectos estructurales. Entre ellos podemos citar estructuras de casas, cubiertas o pérgolas. El trabajo realizado por un carpintero generalmente no requiere el mismo nivel de cuidado detallado como el trabajo de un ebanista. Trabajar para armar la estructura de una casa, por ejemplo, no se trata de una tarea particularmente delicada, o que requiera un nivel mínimo de detalle.
Ambos son expertos en trabajar con materiales de construcción de alta calidad y construcciones complejas e intrincadas. Utilizan para ello una selección de herramientas que suelen incluir una buena mesa de sierra, una sierra de inglete, una sierra de panel, una ensambladora, una cepilladora, una lijadora de tambor, una sierra de cinta para cortes de madera en vertical, y un sistema de extracción de polvo.
Los ebanistas de calidad también tendrán una gran selección de herramientas manuales, como fresadoras con una selección de brocas, taladros inalámbricos, recortadoras de laminado, sierras de calar o grapadoras de acabado.
Ponemos un ejemplo práctico, la carpintería se refiere por lo general, a las reparaciones o la creación de estructuras o elementos de madera para el hogar, mientras que la ebanistería se refiere al proceso de trabajar dentro del hogar, como juntas de ventanas, curvas, bóvedas o arcos.
Si bien el trabajo de un ebanista suele suponer un desembolso económico superior para el cliente, por la calidad de materiales y precisión en el trabajo de corte y ensamblaje de estos, estos suelen poner más atención al aprovechamiento de estos materiales, evitando cortes innecesarios en piezas que de otra forma quedarían arruinadas aumentando el coste de nuestro proyecto.
Necesitarás al carpintero cuando estés realizando renovaciones en tu hogar para completar el trabajo estructural, así como para construir cosas. Y al ebanista si lo que necesitamos son artículos con detalles más complicados. Así pues, dependiendo de cuál sea el objetivo que tenemos en mente debemos recurrir a uno u otro tipo de profesional, teniendo claras las competencias de cada uno.




